https://doi.org/10.29059/cienciauat.v20i1.1931
Nuevos
registros de peces crípticos para el arrecife Lobos, Veracruz, México
New cryptic fish records for Lobos reef, Veracruz, Mexico
Adiciones de peces crípticos en Lobos
Vicencio de la
Cruz-Francisco1*, Vanessa Miranda Osuna-Cisneros1, Seth
Donovan Flores-Serrano1, Jimmy Argüelles-Jiménez2
*Correspondencia:
viccruz@uv.mx/ Fecha de recepción: 11 de septiembre de 2024/Fecha de
aceptación: 6 de mayo de 2025/Fecha de publicación: 21 de mayo de 2025.
1Universidad
Veracruzana, Facultad de Ciencias Biológicas y Agropecuarias, Campus Tuxpan,
carretera Tuxpan-Tampico km 7.5, col. Universitaria, Tuxpan, Veracruz, México,
C. P. 92850. 2Universidad Veracruzana, Facultad de Medicina
Veterinaria y Zootecnia, Veracruz, Veracruz, México, C. P. 91710.
Resumen
Los peces crípticos
son parte importante de la estructura y el funcionamiento de los arrecifes
coralinos, sin embargo, su talla y gran capacidad para camuflarse dificulta su
investigación. El objetivo del presente trabajo fue documentar nuevos registros
de peces crípticos en el arrecife Lobos,
Veracruz, México. Se realizaron 36 censos visuales errantes a través de
buceo libre, distribuidos en tres sitios de la laguna arrecifal en julio del
2022. Se identificaron 5 especies de peces, de las cuales, Starksia
occidentalis es nuevo registro para el Golfo de
México, mientras que Bathygobius mystacium, Ctenogobius saepepallens
Paraclinus nigripinnis
y Xyrichtys splendens
son nuevas adiciones para el arrecife Lobos. Estos registros actualizan el conocimiento de la ictiofauna y
reflejan la necesidad de incrementar el estudio de este grupo de peces, de los
cuales, poco se conoce su función ecosistémica.
Palabras clave: arrecifes, peces, camuflaje, bentos.
Abstract
Cryptic
fishes are an important part of the structure and functioning of coral reefs;
however, their size and great ability to camouflage themselves makes their
research difficult. The objective of the present work was to document new
records of cryptic fishes in the Lobos Reef, Veracruz, Mexico. Thirty-six
wandering visual censuses were conducted through free diving, distributed in
three sites of the reef lagoon in July 2022.
5 fish species were identified, of which Starksia occidentalis is a new
record for the Gulf of Mexico, while Bathygobius mystacium, Ctenogobius
saepepallens, Paraclinus nigripinnis and Xyrichtys splendens are new
additions for Lobos Reef. These new records update the knowledge of the ichthyofauna and reflect the
need to further research into this group of fishes, of which little is known
about their ecosystem function.
Keywords: reefs, fish,
camouflage, benthos.
INTRODUCCIÓN
Los
peces crípticos son aquellos que por su tamaño pequeño y colores oscuros o
moteados se camuflan con el fondo marino y suelen pasar desapercibidos por los
depredadores (Depczynski
y Bellwood, 2003; Rodríguez, 2008; Rodríguez-Quintal,
2010). Estos organismos pertenecen a diversas familias como Gobiidae,
Gobiesocidae, Tripterygiidae,
Blennidae, Labrisomidae y Chaenopsidae (Brandl y col.,
2018; Robertson y col., 2023); y son un componente importante en los arrecifes
coralinos, ya que son abundantes y diversos en especies (Ackerman y Bellwood, 2000). Viven asociados al fondo del arrecife,
habitando ambientes dominados por algas,
pastos marinos, esponjas y corales,
también pueden habitar sustratos inertes, como la arena, fango y rocas
coralinas (Brandl
y col., 2018).
Los
peces crípticos cumplen diferentes funciones, con distintos efectos, dentro de
los arrecifes de coral; entre ellas, la diversidad genotípica y funcional. La
pérdida de estas altera funciones esenciales, como la descomposición a través de las cascadas tróficas, lo que sugiere
que la diversidad funcional críptica, sostenida
por la diversidad genotípica, es crucial para mantener funciones de los
ecosistemas (Raffard y col., 2020). Así, la
depredación que realizan los peces crípticos hacia peces pequeños y crustáceos
(Robertson y col., 2023) aporta en el flujo de energía del ecosistema. Por otro
lado, se ha visto que, en las estaciones de limpieza donde participan peces
crípticos se contribuye en la salud del ecosistema, al mantener saludables
peces de distintos niveles tróficos (Ramírez-Ruíz y col., 2023); mientras que
peces crípticos, como Nes longus, sostienen relaciones comensales con camarones
que construyen túneles (Humann y Deloach,
2014) que oxigenan el fondo marino. Sin embargo, debido a su tamaño pequeño y
coloración particular, los peces crípticos son registrados solo ocasionalmente
en los censos visuales, lo que genera que estén pobremente representados en los
listados taxonómicos (Depczynski y Bellwood, 2003; Rodríguez, 2008; Rodríguez-Quintal, 2010).
En
diversos arrecifes del estado de Veracruz, México, se han registrado peces
crípticos, tal y como ha sucedido con el arrecife Lobos, donde las primeras
contribuciones que abordan su diversidad fueron los estudios de Castro-Aguirre
y Márquez-Espinoza (1981), quienes, a través del uso de sustancias químicas,
como la rotenona, lograron colectar especies de
diversas familias. Posteriormente, González-Gándara (2003), por medio de
censos visuales, incrementó el conocimiento a través de un listado taxonómico
en el que incluyó más especies crípticas para
el arrecife Lobos y cinco arrecifes adyacentes, que ahora forman el Área de Protección de Flora y Fauna “Sistema
Arrecifal Lobos-Tuxpan” (SALT). En la segunda década del siglo XXI se
realizaron nuevas adiciones de peces crípticos para el arrecife Lobos y arrecifes adyacentes, producto de
censos visuales, complementados con colectas manuales a través del uso de
aceite de clavo y redes de mano para la colecta de peces crípticos
(González-Gándara y col., 2013; 2015), los
cuales se encuentran depositados en la colección científica de peces con
las siglas VER-PEC (González-Gándara y col., 2016). Estos esfuerzos por
estudiar la ictiofauna también se extendieron a los arrecifes sumergidos
adyacentes al SALT (González-Gándara, 2014; Cortés-Useche y col., 2015; Ortiz-Lozano y col., 2021), donde se
adicionaron nuevos registros de peces, siendo el reporte más reciente el del
pez ardilla Sargocentron
coroscum (Poey, 1860) (De-la-Cruz-Francisco
y col., 2023).
En el arrecife Lobos se han documentado 29
especies de peces crípticos pertenecientes a las familias Gobiidae,
Gobiesocidae, Tripterygiidae,
Blennidae, Labrisomidae y Chaenopsidae, lo cual ha sido producto de compilaciones,
observaciones y colectas realizadas por González-Gándara (2003),
González-Gándara y col. (2013; 2015) y Argüelles-Jiménez y Gutiérrez-Velázquez
(2025).
El objetivo del presente trabajo fue ampliar el
conocimiento de la riqueza de especies de los peces crípticos en el arrecife
Lobos.
MATERIALES Y MÉTODOS
El
estudio se realizó en la laguna del arrecife
Lobos, el cual se ubica entre las coordenadas 97°13’30.30” W y 21°28’27.95” N (Figura
1). Este arrecife es de tipo plataforma,
presenta un cayo arenoso que forma la Isla Lobos, la cual se sitúa cerca
del extremo sur del arrecife y se eleva 2 msnm de la superficie. También, cuenta con un canal de navegación que
atraviesa la isla, lo que facilita la navegación de embarcaciones menores. La
laguna arrecifal es somera, de aproximadamente 1 m de profundidad; presenta
praderas de pasto marino Thalassia testudinum K.D. Koenig; en la
misma zona proliferan macroalgas, algas filamentosas y colonias dispersas de
corales masivos rodeados de pequeños
arenales. Además existen áreas de roca coralina,
escombros y arenales (Chávez y col., 1970).
Los
lugares explorados fueron: Sitio I, ubicado al suroeste de la laguna arrecifal,
caracterizado por un sustrato de rocas coralinas
con tapetes algales, parches de arena con macroalgas psamófilas
y colonias dispersas del coral cerebro nudoso (Pseudodiploria
clivosa) (Ellis y Solander, 1786), coral
cerebro (Pseudodiploria strigosa)
(Dana, 1846), coral de estrellas rocoso (Orbicella
annularis) (Ellis y Solander,
1786) y coral estrella menor (Siderastrea radians) (Pallas, 1766). Sitio II, ubicado al oeste de la
laguna arrecifal, es una bahía somera, el sustrato que ahora predomina es arenoso con algas psamófilas
(Caulerpa spp) y
algas calcáreas articuladas (Halimeda spp); anteriormente, los pastos marinos presentaban una
mayor talla (30.8 ± 9.1) y cobertura (63.7 ± 20.3) (González-Gándara y col.,
2006) y constituía la zona de alimentación de la tortuga verde: Chelonia mydas (Linnaeus, 1758). Sitio III, ubicado al este de la laguna
arrecifal, cerca de las inmediaciones
del chalán hundido, el sustrato inerte es arenoso con escombros de restos
coralinos, se caracteriza por presentar
pastos marinos de menos de 10 cm de altura, colonias dispersas de P.
clivosa y esponjas masivas como Cliona varians (Duchassaing y
Michelotti, 1864).
En
cada sitio de muestreo se realizaron 12 censos visuales (30 min cada uno)
durante el periodo de julio de 2022, utilizando la técnica de buzo errante,
enfocados a la búsqueda de peces crípticos en los componentes de cada sitio
(arena, escombros, pastos marinos y macroalgas). Se tomaron evidencias fotográficas de los peces observados utilizando
una cámara compacta sumergible TG6 (Olympus, Tokyo,
Japón) con resolución de 12 megapixeles. La
identificación de las especies de peces
se llevó a cabo mediante características de la coloración y morfología externa
del cuerpo. Con el material fotográfico obtenido se validó la identificación de
las especies utilizando guías de identificación de peces del Caribe (Lieske y Myers, 1998; Humann y Deloach, 2014), además se consultó la guía virtual de
peces: Gran Caribe (Robertson y col., 2023) y se revisó bibliografía
especializada (Greenfield, 1979; Tornabene
y col., 2010). Los nuevos registros se describen con los siguientes datos:
material examinado, descripción de la morfología, hábitat, distribución
global y comentarios. El arreglo taxonómico para las categorías superiores
(clase, orden y familia) sigue al criterio de Van-der-Laan y col. (2024).
RESULTADOS
Se
identificaron cinco especies de peces en la laguna del arrecife Lobos (Tabla
1). Una es nuevo registro para el Golfo de
México y cuatro los son para el SALT. Las 2 especies pertenecientes a la
familia Gobiidae y las 2 especies de la familia Labrisomidae son totalmente crípticas, en tanto que, X. splendes,
perteneciente a la familia Labridae es demersal con
comportamiento críptico.
Caracterización taxonómica
Clase: Actinopteri Cope, 1871.
Orden: Gobiiformes Günther,
1880.
Familia: Gobiidae Cuvier, 1816.
Género: Bathygobius Bleeker, 1878.
Especie: Bathygobius mystacium Ginsburg,
1947.
Material examinado. Un individuo de aproximadamente 3 cm
de longitud total, observado en el sitio III de la laguna arrecifal
(97°13’23.93” W, 21°28’13.72” N) el 27 de julio de 2022.
Descripción. Cuerpo alargado, grisáceo a marrón, con boca pequeña y ojos grandes. Aleta dorsal
translúcida. Dorso con tres barras marrones de ancho variable que se extienden
hasta la línea lateral y con una fila de manchas irregulares en la zona ventral
(Figuras 2a y 2b).
Hábitat.
El ejemplar fue observado sobre escombros de roca coralina con arena a 1 m de
profundidad.
Distribución global. Brasil, Florida, Estados Unidos,
Caribe, Golfo de México (Humann y Deloach,
2014) y el Sistema Arrecifal Veracruzano (SAV) (Robertson y col., 2019). Nuevo registro para el arrecife
Lobos.
Comentarios.
La coloración de Bathygobius mystacium es similar a otra especie de la región del
Golfo de México: B. soporator (Valenciennes, 1837), pero esta especie presenta tres barras
dorsales oscuras que se dividen hacia la parte baja, así como manchas oscuras a
los costados (Tornabene y col., 2010).
Caracterización taxonómica
Clase: Actinopteri Cope, 1871.
Orden: Gobiiformes Günther,
1880.
Familia: Gobiidae Cuvier, 1816.
Género:
Ctenogobius Gill, 1858.
Especie: Ctenogobius saepepallens (Gilbert y Randall,
1968).
Material examinado. 18 individuos de 3 cm
a 5 cm de longitud total observados en el sitio
II de la laguna arrecifal (97°13’43.59” W, 21°28’11.62” N), el 30 de julio de
2022.
Descripción. Cuerpo alargado y moteado en el dorso, la
coloración distintiva consiste en una barra vertical negra que atraviesa el ojo
y se extiende a la mandíbula, con una mancha
triangular o irregular oscura sobre el opérculo. A los costados del cuerpo
presenta una fila de seis rayas negras horizontales y una mancha al final de la
base del caudal (Figuras 2c y 2d).
Hábitat. La especie fue observada sobre sustrato
arenoso con escombros de roca coralina y pastos marinos a 1 m de profundidad.
Distribución global. Brasil, Florida, Estados Unidos, Caribe (Humann y Deloach, 2014) y el SAV (Robertson y col., 2023). Nuevo
registro para el arrecife Lobos.
Comentarios. C. saepepallens
es una especie criptobentónica, y en la región del
atlántico occidental hay varias especies similares en la coloración del cuerpo,
por ejemplo, Ctenogobius claytonii (Meek, 1902), Gnatholepis thompsoni
Jordan, 1904 y B. soporator.
C. claytonii carece de una mancha negra en el
opérculo, además, a lo lados del cuerpo en
vez de filas horizontales presenta
cinco barras oscuras; G. thompsoni
tiene un color blanquecino amarillento y carece de las líneas horizontales a
los costados del cuerpo, mientras que, B. soporator
presenta un color grisáceo con tres barras de color marrón en el dorso, las
cuales se dividen y se extienden hacia la región ventral. C. saepepallens se reporta desde ambientes someros hasta
los 20 m de profundidad (Humann y Deloach, 2014; Robertson y col., 2023).
Caracterización
taxonómica
Clase: Actinopteri Cope, 1871.
Orden: Blenniiformes Bleeker, 1860
Familia: Labrisomidae Clark Hubbs, 1952
Género:
Paraclinus Mocquard,
1888
Especie:
Paraclinus nigripinnis
(Steindachner, 1867).
Material examinado. Un individuo de 3 cm
de longitud total observado en el sitio III de la laguna arrecifal (97°13’25.27” W, 21°28’11.11” N) el 27 de julio
2022.
Descripción. Cuerpo alargado de coloración marrón
oscuro con tonalidades blanquecinas, nuca de color blanco y cirros pálidos;
presenta barras oscuras a los lados del
cuerpo, la aleta dorsal también tiene barras oscuras y un ocelo negro con el centro azul. Por igual, la aleta anal presenta barras oscuras (Figuras 3a y 3b).
Hábitat. Esta especie se observó sobre escombros de roca coralina,
con arena y pastos marinos (T. testudinum) a 1
m de profundidad.
Distribución global. Florida, Estados Unidos, hasta el sur
del Caribe (Robertson y col., 2023) y SAV (GBIF,
2025). Nuevo registro para el arrecife Lobos.
Caracterización
taxonómica
Clase: Actinopteri Cope, 1871.
Orden: Blenniiformes Bleeker, 1860
Familia: Labrisomidae Clark Hubbs, 1952
Género:
Starksia Jordan y Evermann, 1896.
Especie:
Starksia occidentalis
Greenfield, 1979
Material examinado. Un individuo de 2 cm
de longitud total observado en el sitio III de la laguna arrecifal
(97°13’27.82” W, 21°28’6.25” N) el 27 de julio de 2022.
Descripción. Cuerpo alargado, cabeza pequeña y
hocico corto, presenta cirros en la nuca en posición nasal y orbital. La
coloración distintiva consiste en una barra horizontal pálida detrás del ojo en
forma de Y; en el dorso resaltan tres filas de manchas irregulares marrones
oscuras que contrastan con un color marrón
pálido del cuerpo (Figuras 3c y 3d).
Hábitat. Esta especie se observó sobre escombros de roca coralina,
con arena y pastos marinos (T. testudinum) a 1
m de profundidad.
Distribución global. Se distribuye en el
Caribe (Greenfield, 1979). Primer registro para el Golfo de México.
Comentarios. El género Starksia
es muy diverso en el atlántico occidental con 28 especies válidas (Williams y Mounts, 2003; Baldwin y col., 2011), sin embargo, para el
Golfo de México, solamente se tiene conocimiento del registro de Starksia ocellata (Steindachner, 1876) para el SAV (Robertson y col., 2019) y
SALT (González-Gándara y col., 2015). Ahora con el registro de S. occidentalis, que aporta este trabajo, el género Starksia está representado por dos especies en el
Golfo de México. S. ocellata se diferencia del presente nuevo registro
(S. occidentalis) por carecer de manchas
verticales en los labios y de una barra
horizontal en forma de Y (Greenfield, 1979).
Caracterización
taxonómica
Clase: Actinopteri Cope, 1871.
Orden: Labriformes Kaufman y Liem, 1982.
Familia: Labridae Cuvier, 1816.
Género: Xyrichtys
Cuvier, 1814.
Especie: Xyrichtys splendens Castelnau, 1855.
Material examinado.
Un individuo de 7 cm de longitud total observado en el sitio I de la laguna
arrecifal (97°13’42.10” W, 21°28’2.79” N), el 26 de julio de 2022.
Descripción. Individuo de fase intermedia, de cuerpo
alargado y comprimido lateralmente, aleta dorsal continua con las dos primeras
espinas altas, aleta caudal ligeramente redondeada y aleta anal amplia. La
coloración distintiva consiste en barras verticales de color marrón verdoso a
los costados y con una mancha negra a la mitad de su cuerpo. Los bordes de las
aletas dorsal, anal y caudal de color naranja, el resto del cuerpo es de color
amarillo (Figuras 3e y 3f).
Hábitat. Esta especie se observó sobre sustrato
arenoso con rocas coralinas cubierto de macroalgas del género Padina, al suroeste de la laguna arrecifal, a una profundidad de 1 m.
Distribución global. Brasil, Caribe, Florida, Estados
Unidos (Lieske y Myers, 1998; Humann y Deloach, 2014) y SAV (Del-Moral-Flores y col., 2013;
Robertson y col., 2023). Nuevo registro para el arrecife Lobos.
Comentarios.
Es de hábitos escurridizos y por su
coloración pasa desapercibido entre los pastos marinos y macroalgas,
habita en zonas arenosas con pastos marinos
de áreas someras y profundas de hasta 15 m (Robertson y col., 2023).
DISCUSIÓN
El
escaso nivel de conocimiento de la diversidad y distribución de los peces
crípticos se origina por el reducido número de estudios enfocados a este grupo de peces (Brandl
y col., 2018). Es por ello que, las técnicas
invasivas (rotenona, trampas, redes) y no invasivas (censos), enfocadas a los
peces crípticos, han sido esenciales para incrementar el conocimiento de su
diversidad, así como dilucidar su papel funcional.
Anteriormente, se utilizaron métodos invasivos
como rotenona en el arrecife Lobos, lo que permitió obtener los primeros registros de peces crípticos (Castro-Aguirre
y Márquez-Espinoza, 1981), sin embargo, esta técnica de colecta ya no está
permitida, dado que el arrecife Lobos forma parte de un área natural protegida.
El
censo errante es un método no invasivo que se considera con limitaciones para
el registro de peces crípticos (Depczynski y Bellwood, 2003; Rodríguez-Quintal, 2010; Brandl y col., 2018). Sin embargo, permite una búsqueda
cautelosa, lo que evita la reacción de los peces, que tienden a escapar y
ocultarse rápidamente ante movimientos bruscos. Se debe desarrollar, de manera
minuciosa, para distinguir este grupo de peces del sustrato, ya que
generalmente pasan desapercibos por el observador. Además, no se requieren
permisos de captura, por lo que es fácil y rápido su empleo. En este estudio,
se utilizó dicho método y permitió registrar 5 nuevos registros de peces en el
arrecife Lobos, pertenecientes a las familias Gobiidae,
Labrisomidae y Labridae,
las cuales presentaban una riqueza de 16, 4 y 12 especies (González-Gándara y
col. 2003; González-Gándara y col., 2013; 2015), por lo que, la riqueza
asciende a 18, 6 y 13 especies para cada
familia, respectivamente. Cabe destacar que, de estos nuevos registros,
X. splendens es principalmente demersal, al igual que las otras especies Labridae reportadas en la zona (Tabla 2). Sin embargo, se
decidió incluirlo en este estudio, debido a
su comportamiento críptico, ya que se
oculta en fondos rocosos, arenosos y entre las algas, y su forma y coloración
dificultan su observación a primera vista, porque puede permanecer escondido por varios minutos (Humann
y Deloach,
2014).
Los
nuevos registros encontrados prueban la eficacia de los censos errantes, que
pueden ser usados como complemento en las técnicas tradicionales de muestreo no
invasivas enfocadas a los peces, como la de transecto en banda y censos
estacionarios, las cuales han sido los principales métodos de muestreo y que
han generado la mayor parte del conocimiento de la ictiofauna del arrecife Lobos y del SALT (González-Gándara y González-Sansón, 1997; González-Gándara, 2003; González-Gándara y col., 2006; 2012; 2013; 2015).
Las
cinco especies identificadas se han reportado como micro carnívoras,
alimentándose principalmente de crustáceos móviles bentónicos, así como gusanos
poliquetos, solo X. splendens agrega a su
dieta moluscos y zooplancton (Robertson y col., 2023). Dicha información
propone que estas especies ingresan energía al sistema a través de la
depredación, la cual es importante en los controles del flujo de la energía en los ecosistemas coralinos
(Argüelles-Jiménez y col., 2020; 2021b). Además, se ha descrito que algunas especies de peces crípticos, como Helcogrammoides cunninghami (Smit, 1898),
cambian su dieta conforme la disponibilidad del alimento, pasando de bivalvos a anfípodos y decápodos (Winkler y
col., 2017). En cambio, otros peces crípticos endémicos de Veracruz (Elacatinus jarocho Taylor y Akins, 2007) solo se
alimentan de fitoplancton (Robertson y col., 2023). Dicha información
indica que los peces crípticos pueden ser carnívoros generalistas, carnívoros
especializados y en algunos casos pueden
optar por cambio de dieta conforme
el alimento esté disponible, sin embargo, la llegada de peces crípticos
no nativos al suroeste del Golfo de México,
como Protemblemaria
punctata Cervigon, 1966
(Argüelles-Jiménez y col., 2021a), la cual se alimenta tanto de plancton como de los componentes tróficos
que consumen las cinco especies registradas,
podría ocasionar disturbios ecosistémicos.
Aunque P. punctata no ha sido registrada fuera
del centro de Veracruz, es importante considerar el monitoreo de este grupo de
peces del que aún se desconocen aspectos
sobre su dieta, abundancia, densidad, distribución
(Depczynski y Bellwood,
2003; Brandl y col., 2018) y las estaciones de
limpieza donde ayudan a mejorar la salud del ecosistema (Ramírez-Ruíz y col.,
2023).
Las
lagunas de conocimiento de este grupo de peces pobremente estudiados (Depczynski y Bellwood, 2003) se
puede ver en distintos sistemas arrecifales como en el SALT. Los últimos
estudios de la ictiofauna del arrecife Lobos han sido principalmente a través
de listados taxonómicos. González-Gándara (2003) reportó 24 especies crípticas
pertenecientes a las familias de Tripterygiidae, Labrisomidae, Chaenopsidae, Blenniidae, Gobiesocideae, Gobiidae y Labridae. Más tarde, Taylor y Akins (2007)
documentaron 2 especies más de la familia Gobiidae: Elacatinus jarocho y Tigrigobius
redimiculus.
Posteriormente, González-Gándara y
col. (2013) reportaron la misma
composición de especies y adicionaron 1 registro para la familia Blennidae: Entomacrodus
nigricans Gill, 1859, y 2 registros más para Gobiidae:
Coryphopterus puntipectophorus
Springer, 1960 y Trigrigobius dilepis (Robins & Böhlke, 1964). Esta
riqueza de 29 especies se mantuvo constante en el informe de
González-Gándara y col. (2015). Con los
nuevos registros que aporta el presente trabajo, el conocimiento sobre
los peces totalmente crípticos en el arrecife
Lobos se incrementa a 33 especies y a 13 especies demersales con comportamiento críptico (Tabla 1).
Por otra parte, en la última investigación donde se evaluó el ensamble comunitario de los peces en el arrecife Lobos, realizado
hace dos décadas, no mencionaron en sus resultados a los peces crípticos
(González-Gándara y col., 2006). Por ello, es necesario implementar nuevos
estudios orientados a evaluar los ensambles comunitarios de los peces (en el
día y la noche), en especial de las especies crípticas, lo cual elevaría la
riqueza de especies, por lo que se tendrían listados taxonómicos más completos
que ayudarían a profundizar en el conocimiento de la estructura y función de la
ictiofauna críptica, información que resultaría relevante y útil para las estrategias de manejo y protección,
ante la presencia del pez león (que ha sido observado por los autores en la
laguna arrecifal), el cual representa una amenaza a la ictiofauna nativa del arrecife Lobos y del SALT, por ejemplo, para
las especies de Halichoeres burekae Weaver y Rocha, 2007, T. redimiculus
y E. jarocho, las cuales se han encontrado en el contenido estomacal del pez león (González-Gándara y col.,
2020).
Estudios
realizados en el SALT han documentado que, dentro de las presas que consume el
pez león se encuentran distintas familias de peces crípticos, por ejemplo, Gobiidae, Blenniidae y Labrisomidae (González-Gándara y col., 2020;
González-Gándara, 2023), familias a las que pertenecen los nuevos registros que
aporta este estudio.
Por
lo tanto, resulta necesario aplicar planes de manejo y control de las
poblaciones del pez león, principalmente en las pendientes de sotavento y
barlovento, lugares donde se encuentran peces crípticos endémicos y potenciales
presas del pez león exótico invasor del género Pterois
(González-Gándara, 2023).
En
este estudio se destaca el registro de S. occidentalis
que, aunado a las contribuciones de Robertson
y col. (2019), Rivera-Higueras y Pérez-España (2022) y Argüelles-Jiménez
y col. (2021a), incrementan el conocimiento de la fauna críptica de los
arrecifes de Veracruz. Ante la amenaza que representan las especies no nativas
como el pez león (depredación) y P. punctata
(competencia por espacio y alimento) en las especies crípticas nativas, estas
contribuciones son valiosas, ya que incrementan el conocimiento de su riqueza
íctica a escala local y actualizan el conocimiento de la ictiofauna a nivel del
suroeste del Golfo de México (Argüelles-Jiménez y Gutiérrez-Velázquez, 2025),
información que puede ser de utilidad para la implementación de medidas de manejo
y protección más eficaces a fin de salvaguardar las especies crípticas marinas.
CONCLUSIONES
Los
cinco nuevos registros de peces crípticos documentados en el presente trabajo, Bathygbius mystacium, Ctenogobius saepepallens, Paraclinus nigripinnis, y Xyrichtys splendens,
para el arrecife Lobos, Veracruz, y S. occidentalis
para el Golfo de México, reflejan la necesidad de incrementar la investigación
en el área de este grupo de peces cuya función ecosistémica poco se conoce.
Dicha información ayudaría a enfocar las acciones de manejo y conservación, las
cuales son imprescindibles en estos ecosistemas marinos para salvaguardar la biodiversidad.
Declaración de conflicto de intereses
Los
autores declararon no tener conflictos de intereses de ningún tipo.
Referencias
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