Microalgas del Área Natural Protegida Ejidos de Xochimilco y San Gregorio Atlapulco, México

Microalgae of Natural Protected Area Xochimilco and San Gregorio Atlapulco Ejidos (collective use rural lands), Mexico

 

María Guadalupe Figueroa-Torres1, Fernando Arana-Magallón1, Saúl Almanza-Encarnación1, María Guadalupe Ramos-Espinosa2, María Jesús Ferrara-Guerrero1

 

*Autor para correspondencia: figueroa@correo.xoc.uam.mx/ Fecha de recepción: 17 de febrero 2014 / Fecha de aceptación: 22 de mayo de 2015

 

1Universidad Autónoma Metropolitana Xochimilco. Departamento el Hombre y su ambiente, División de Ciencias Biológicas y de la Salud, Calzada del Hueso 1100, col. Villa Quietud, México D.F., México, C.P. 04960. 2 Universidad Autónoma Metropolitana Xochimilco. Departamento de Producción Agrícola y Animal, Calzada del Hueso 1100 col. Villa Quietud, México D.F., México, C.P. 04960.

 

RESUMEN

En México la mayor parte de los escasos los trabajos de las espe­cies microscópicas, pese a que poseen una gran importancia ecológica, económica y propie­daes de interés para el sector salud. En la zona de estudio, Área Natural Protegida Ejidos de Xo­chimilco y San Gregorio Atlapul­co, Ciudad de México, este es­quema se repite, encontrándose pocos trabajos sobre las microal­gas de los canales de Xochimilco y ninguno sobre San Gregorio Atlapulco. El objetivo del pre­sente trabajo fue elaborar un in­ventario de las microalgas de los canales de estas dos áreas. Para el caso de Xochimilco, se hizo una revisión bibliográfica exhaustiva, que abarcó de enero de 1933 a diciembre de 2014. Para el caso de San Gregorio Atlapulco, de­bido a que no había estudios previos, se realizó un muestreo en enero del 2013 en 17 estacio­nes distribuidas en toda la zona, con una red de arrastre de aber­tura de malla de 54 μm y con una botella van Dorn. Las muestras se preservaron con formalina al 4 % y con lugol al 1% respectiva­mente, obteniendo un total de 34 muestras. Se generó un listado de 370 especies de microalgas para toda el Área Natural Protegida, de las cuales, 36 % pertenecieron a Clorofitas; 24 % a Euglenofitas; 24 % a Diatomeas, 12 % a Ciano­procariotas, 3 % a Dinoflagelados y 1 % a Cromofitas, con 27 nuevos registros para San Gregorio Atlapul­co. Entre las especies registradas, Microcystis aeruginosa y Peridinium willei forman florecimientos algales tóxicos, por lo que se hace necesa­rio monitorear estos ecosistemas para prevenir sus efectos noci­vos, además de continuar con los estudios ficoflorísticos de la región.

 

PALABRAS CLAVE: Microalgas, Xochimilco, San Gregorio, México.

 

ABSTRACT

In Mexico, most of macroscopic organisms, with few studies on species of microflora, in spite of the high importance they bear in ecological and economical values and the properties of interest that they hold for the health sector. In the context where this research was carried out, the Natural Protected Area of Xochimilco and San Gregorio Atlapulco Ejidos in Mexico City, this pattern is repeated. There are a very small number of studies on Xochimilco’s channel microalgae and no research of this nature has been carried out in San Gregorio Atlapulco. The aim of this work was to develop an inventory of microalgae Xochimilco and San Gregorio Atlapulco canals. In of the case of Xochimilco, a comprehensive review of literature related to microalgae studies ranging from January 1933 to December 2014 was conducted. Since there were no previous studies in the case of San Gregorio Atlapulco, sampling was conducted in January 2013 in 17 stations distributed throughout the area with a trawl net of 54 μm mesh size and a van Dorn bottle. The samples were preserved with formalin 4 % and 1 % lugol respectively, obtaining a total of 34 samples. A list of 370 species of microalgae were obtained for all the Natural Protected Area from which 36% belong to Chlorophytes; 24 % Euglenophytes; 24 % Diatoms; 12 % belong Cianoprocariotas, 3 % Dinoflagellates, and 1 % Cromofitas, 27 new records for San Gregorio Atlapulco. Among the species recorded, Microcystis aeruginosa and Peridinium willei produce toxic algal blooms, therefore it is necessary to monitor these species and ecosystems to prevent its potential harmful effects, besides continuing ficofloristics studies of the region.

KEYWORDS: Microalgae, Xochimilco, San Gregorio, Mexico.

 

INTRODUCCIÓN

En la porción sur de la Cuenca de México se encuentran una se­rie de humedales, únicos en el mundo, por formar parte de la chinampería (sistemas de pro­ducción agrícola creados por los pueblos originarios de mesoa­mérica), la cual posee gran valor biológico, ecológico, social, cultural y económico. Debido a estas cir­cunstancias, el 11 de diciembre de 1987 las chinampas de Xochi­milco y San Gregorio Atlapulco fueron declaradas “Patrimonio Cultural de la Humanidad” por la UNESCO, con una área de 7 534 ha. Los días 7 y 11 de mayo de 1992 se publicó en el Diario Oficial de la Federación, el decreto en el que se estableció como zona prioritaria de preservación y conservación del equilibrio ecológico, declarán­dola como Área Natural Protegida (ANP), bajo la categoría de Zona Sujeta a Conservación Ecológica “Ejidos de Xochimilco y San Gre­gorio Atlapulco” con una superfi­cie de 2 657 ha. Aunado a lo an­terior, el 2 de febrero de 2004, la Convención Internacional sobre Humedales Ramsar inscribió a la zona lacustre de Xochimilco en la Lista de Humedales de Importan­cia Internacional, con la denomi­nación “Sistema Lacustre Ejidos de Xochimilco y San Gregorio Atlapul­co”, por lo que se estableció que de­berá asegurarse el mantenimiento de sus características naturales (Gaceta Oficial del Distrito Federal, 2006).

 

México es uno de los 12 países megadiversos, que en conjunto albergan entre el 60 % y 70 % de la diversidad biológica del mundo, y por sí mismo reúne al menos el 10 % del total de las especies (CONABIO, 2006). Lo anterior se refleja en el Sistema Lacustre Ejidos de Xochimilco y San Grego­rio Atlapulco, Ciudad de México, ya que también posee una gran diversidad biológica, con 139 especies de vertebrados, de las cuales 11 se encuentran enlista­das dentro de alguna categoría de protección de acuerdo a la NOM­059-SEMARNAT-2001 (Gaceta Oficial del Distrito Federal, 2006). En cuanto a las plantas vasculares, se han registrado 146 especies, distribuidas en 101 géneros y 16 familias (Tecalcon, 2007), además de cerca de 200 especies orna­mentales cultivadas. Sin embargo, los estudios sobre las microalgas de la región son escasos, aisla­dos y relativamente recientes (de 1933 a la fecha), no existiendo antecedentes para la zona de San Gregorio, lo que puede deberse a que se requiere de equipo es­pecializado para su recolecta y revisión, y a que existen muchos problemas relacionados con la identificación y delimitación de las especies a causa de su enorme plasticidad morfológica, aunado a que en México es escaso el número de taxónomos especializados en estos grupos.

 

Las microalgas de agua dulce son importantes porque ofrecen servicios ecosistémicos, debido a que son productores primarios que capturan CO2 y liberan oxígeno a la atmósfera; sirven de alimento a pequeños crustáceos, peces y anfibios; limpian los ecosistemas eutrofizados ricos en materia orgánica, tranformándola en bio­masa disponible, de la cual se ob­tienen pigmentos, antioxidantes, vitaminas y biodiésel; eliminan metales pesados y sirven como indicadores biológicos para monitorear la contaminación del agua, entre otros muchos aspectos (Chung y col., 1978; McGeoch y Chown, 1998; Korunic y Mackay, 2000; Niemi y McDonald, 2004; Illana, 2008; Garibay y col., 2009; Garza y col., 2010; Infante y col., 2012; Segura y col., 2012; Muniz y col., 2013; Oliva y col., 2014). También es importante señalar que no todas las algas son bené­ficas, se ha observado que hay al­gunas especies oportunistas, que llegan a desarrollarse masivamente aprovechando el exceso de mate­ria orgánica de origen antrópico. La Cianoprocariota Microcystis aeruginosa es una de estas especies y puede producir daños causando irritación de la piel, enfermedades citotóxicas e in­cluso cáncer de páncreas, tanto en animales como en el hombre (Terrel y Bytnar, 1996; Dobal y col., 2011). Las toxinas tienden a concentrarse a lo largo de las ca­denas tróficas, de modo que los peces que se alimentan de ellas suelen ser tóxicos para el hom­bre (Arbeláez y Ruiz, 2013).

 

Considerando la importancia de las microalgas de agua dulce y los pocos trabajos existentes en la zona de estudio, el objetivo de este trabajo consistió en hacer una revisión bibliográfica de la com­posición microalgal de los canales de Xochimilco, además de generar el primer registro de las especies de San Gregorio Atlapulco.

 

MATERIALES Y MÉTODOS

Para realizar el inventario de mi­croalgas del Área Natural Protegida Ejidos de Xochimilco y San Gregorio Atlapulco de la Ciudad de México, se realizó una revisión bibliográ­fica que comprendió el periodo de enero de 1933 a diciembre de 2014, se revisaron 63 obras, entre las que destacan los trabajos de Sámano (1933, 1934, 1940); Ortega (1952, 1972, 1984); Pérez y Salas (1960a, 1960b); Aguayo (1993); Figueroa y Moreno (2003); Figueroa y col. (2008); Figueroa (2009, 2013); López y col. (2010). En el caso de las microalgas de San Gregorio Atlapulco (Figura 1), no se encontraron registros previos, por lo que se realizó un muestreo en enero de 2013. San Gregorio Atlapulco se encuentra ubicado entre los 19°16´10˝ y 19°16´28˝ LN y 99°04´33˝ y 99°04´51˝ LO; se establecieron 17 estaciones dis­tribuidas en toda la zona, tratando de cubrir diferentes condiciones microambientales. Las muestras se recolectaron con una botella van Dorn, marca Ocean Net (Valencia, España); se depositaron en frascos comunes de vidrio de 250 mL, y se les agregó lugol al 1 % final, éste es un fijador suave que conserva los flagelos de los organismos, pero presenta una pronta degradación de las muestras (días o semanas); de manera complementaria se obtuvieron muestras concentra­das con el empleo de una red de arrastre de fitoplancton con abertura de malla de 54 μm, marca KC Denmark (Silkeborg, Dinamarca), las cuales se colocaron en frascos de 30 mL, y se les agregó formalina al 4 %, que a diferencia del anterior, es un fijador fuerte que conserva las muestras por años, pero no con­serva las estructuras delicadas. Se obtuvieron un total de 34 muestras. La revisión se llevó a cabo sobre submuestras de 0.1mL de agua de cada lugar, basándose en la técnica de barrido de Schwöerbel (1975). Se realizaron repeticiones hasta que no se observara ningún organ­ismo nuevo. Para esto, se utilizó un microscopio óptico marca Zeiss, modelo Axiostar (Alemania). La identificación se realizó con ayuda de descripciones taxonómicas e ilustraciones de Ortega (1952, 1972, 1984); Pérez y Salas (1958; 1960a; 1960b; 1961); Bourrelly (1966; 1968; 1970); Figueroa y col. (2008); Oliva y col. (2008); Valadez y col. (2010); Guiry y Guiry (2012); Novelo (2012); Soon (2013); Khalid y col. (2014). Se siguió el sistema de clasificación de Hoek y col. (1995) y Wehr y Seath (2003) a nivel de División, y la nomencla­tura de las especies se actualizó siguiendo la base de datos Algae­Base de Guiry y Guiry (2012).

 

 

RESULTADOS Y DISCUSIÓN

De la revisión bibliográfica y los estudios de campo y labo­ratorio sobre las microalgas del Área Natural Protegida Ejidos de Xochimilco y San Gregorio Atlapulco se registraron un total de 370 taxa, de los cuales 133 pertenecen a Clorofitas lo que corresponde al 36 %; 88 a Eugle­nofitas con el 24 %; 89 a Diatomeas con 24 %; 46 a Cianoprocariotas con 12 %, 10 a Dinoflagelados con 3 % y 4 a Cromofitas con 1 % (Tabla 1).

 

De la revisión de las muestras de San Gregorio Atlapulco, se deter­minaron 27 especies, todas ellas primeros registros para esta zona, de las cuales, 23 se encuentran tam­bién en los canales de Xochimilco.

 

En San Gregorio Atlapulco las mi­croalgas mejor representadas fue­ron las Clorofitas con 13 especies, constituyendo el 48 % del total, siguiéndole las Diatomeas con siete especies (26%), las Cianoproca­riotas con cuatro especies (15 %), las Euglenofitas con dos especies (7 %), y por último los Dinoflage­lados con una especie (4 %); no se encontraron Cromofitas (Figura 2).

 

 

 

Entre las especies en común en ambos sistemas se encuentran Cianoprocariota: Anabaenopsis circularis; Clorofita: Acutodesmus acuminatus, Ankistrodesmus fal­catus, Closterium acutum, Crucige­nia tetrapedia, Kirchneriella obesa, Monoraphidiums convolutum, Monoraphidium sp., Pandorina mo­rum, Scenedesmus quadricauda var. westii, Scenedesmus quadrispina, Staurastrum cf. lapponicum, Te­traëdron minimum y Tetrastum gla­brum; Euglenofita: Euglena viridis y Phacus pleuronectes, y Diatomeas: Craticula cuspidata, Cyclotella meneghiniana, Epithemia turgida, Gomphonema olivaceum, Gompho­nema parvulum, Hantzschia cf. am­phioxys var. vivax y Navicula sp.

 

En San Gregorio solo se detec­taron cuatro especies diferentes a las de los canales de Xochimilco: Arthrospira maxima, Merismope­dia glauca, Microcystis sp. y Peri­dinium willei, lo que incrementa ligeramente el total de registros que se tienen para toda la zona pa­trimonial, de 366 a 370 especies, sin mostrar variación en los por­centajes totales (Figura 3).

 

 

Cabe señalar que en San Gregorio Atlapulco Cyclotella meneghiniana es escasa, a pesar de que en los canales de Xochimilco suele ser abundante y frecuente; de manera similar, las especies Cocconeis placentula, Pediastrum sp. y Planktothrix agardhii no se encontraron en San Gregorio Atlapulco y en los canales de Xochimilco son frecuentes y abundantes, revelando de forma indirecta la existencia de diferencias microambientales entre ambos sistemas.

 

Llama la atención la presencia de Microcystis aeruginosa en los ca­nales de Xochimilco, ya que es una especie nociva que produce mi­crocystina, que es una substancia hepatotóxica, además de que es indicadora de eutroficación (Car­valho y col., 2013). La especie Ar­throspira maxima estuvo presente históricamente en los canales de Xochimilco y ha sido utilizada como alimento desde la época pre­hispánica por poseer un alto valor nutrimental. Actualmente solo se encuentra en San Gregorio en bajas cantidades, por lo que requiere ser protegida para evitar su desapa­rición. Es importante destacar que su producción comercial proviene de otros sitios y no de esta región.

 

Por otra parte, se pudo obser­var que con el trabajo realizado, aumentó de modo sustancial el conocimiento de los recursos fi­cológicos del Área Natural Prote­gida de Xochimilco y San Gregorio Atlapulco, ya que los 370 taxa registrados constituyen más del triple de las especies reportadas para dicha zona en la Gaceta Oficial del Distrito Federal (2006), donde se mencionan tan solo 115. Tam­bién aumenta el número de regis­tros para los ecosistemas acuáticos de la Ciudad de México, ya que Oli­va y col. (2014), reportaron única­mente 184 especies de algas y en este estudio se contabilizaron más del doble. Por otra parte, Novelo y Tavera (2011), en su trabajo sobre las algas de agua dulce de México reportaron 651 especies para todo el Distrito Federal; sin embargo, por los alcances del mismo, no se­ñalan las localidades ni los cuerpos de agua en donde fueron registra­das, por lo que no se puede hacer una comparación con los resulta­dos de este estudio.

 

En términos generales, se pudo constatar que son escasos y esporádicos los trabajos ficológicos realizados en el Área Natural Protegida, ya que en este estudio se presentan los primeros registros de microalgas de los canales de San Gregorio Atlapulco. Se puede observar que los datos existentes subestiman la riqueza de especies en esta zona, por ello se considera que si se intensifican los muestreos, es muy probable que se obtengan nuevos registros, aspecto que coincide con lo señalado por Novelo y Tavera (2011), para todo el país.

 

Pedroche y col. (1993), desde hace más de dos décadas, también refieren la falta de trabajos sobre la riqueza específica de las algas de ambientes de agua dulce del país, debido a la naturaleza de este gru­po que implica el enfrentamiento con una diversidad morfológica, reproductiva y ecológica conside­rable, con relaciones filogenéticas y criterios de clasificación poco claros. Estos aspectos a la fecha se han ido resolviendo con la ayuda de nuevas tecnologías como la mi­croscopía electrónica y la biología molecular, sin embargo, todavía hay mucho trabajo por hacer al respecto.

 

Aunado a lo anterior, se considera necesario realizar monitoreos constantes, debido a que las condiciones ambientales están cambiando rapidamente en los últimos años a causa de las actividades de origen antrópico, como es el caso de la contaminación del agua y el cambio climático, factores que se reflejan en la desaparición, en los canales de Xochimilco, de especies sensibles como Arthrospira maxima, y en la generación de condiciones que favorecen el desarrollo masivo de especies potencialmente tóxicas como Microcystis aeruginosa y Peridinium willei.

 

CONCLUSIONES

Se registraron un total de 370 especies de microalgas en el Área Natural Protegida de Xochimilco y San Gregorio Atlapulco, lo que incrementó de manera importante el conocimiento de su riqueza de especies, con respecto a los reportes existentes hasta el momento. Para el caso de San Gregorio, al no existir estudios previos, este trabajo contribuyó con el primer registro de 27 especies de microalgas. Debido a la escasez de trabajos ficológicos en la región, a su importancia científica, ecológica y económica y al riesgo que puede causar la presencia de especies tóxicas a la salud humana, es necesario continuar con la elaboración de los inventarios en la región.

 

AGRADECIMIENTOS

Se agradece a la Universidad Autónoma Metropolitana y al Cuerpo Académico Sistemas y Procesos Ecológicos de los Recursos Acuáticos Tropicales (SEP Clave: UAM-X-CA-44), por el apoyo brindado para la realización del presente trabajo.

 

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